El que no arriesga, no gana

Ahora es cuando la evidente crisis se planta sobre la tierra y deja ver lo que sus raíces traen. El cielo no luce al sol como invitado, y soy la que pierde sus murallas mientras ganas todo lo que tenía guardado. "El que no arriesga, no gana" dijo alguna vez un hombre, y "el que arriesga, puede morir de amor" replanteo el que se sentaba enfrente, ahora muero de amor, con la crisis metiéndose entre mis manos, y tú recubriéndote con su cuerpo. Y mientras ríes, lloro. Mientras cantas, callo. Mientras juegas, me siento a esperarte. Mientras mientes, veo la verdad. Mientras olvidas, recuerdo y te extraño. Mientras te alegras, me lamento. Mientras te vas lejos, yo me quedo soñando y oliendo tu perfume en cualquier recoveco de la habitación que alguna vez, creí que seria solo para ti, me recuesto a quererte en esa cama donde alguna vez esperaba quererte sin ningún miedo, y abrazarte hasta que amaneciese para verte otra vez al despertar y empalagarme con esos besos, que lo encienden todo. Tú nunca fuiste mío, pero yo soy tuya. Ahora soy yo la que abrió las puertas del corazón para perder, la que se enamora una vez mas, y tu, el que vuelve a ser, lo que siempre dije que eras : hombre. La diferencia es que antes había alguien encima tuyo, ahora, estas arriba de todo, ahora completas todos mis sentidos. Y aunque quisiera odiarte y el tiempo no exista, a veces es demasiado tarde para dejar de querer.